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El futuro de Internet y de la comunicación social


Este número 80 de TELOS trae consigo una doble simbología por su cifra y por su historia: por su número, redondo, explicita que nuestra revista ha sido editado durante veinte años continuos. Pero la historia de las publicaciones discurre a menudo por meandros tan complejos como los de la sociedad que las engendra, de forma que, realmente, los números cero de TELOS estaban en preparación en el otoño de 1984 y su número 1 apareció en enero de 1985. Un nacimiento precoz si se tiene en cuenta que ese parto se cobijaba ya bajo el objetivo de explorar la convergencia tecnológica -entre telecomunicaciones, informática, comunicación social- en momentos prematuros de tales procesos, y bajo la perspectiva confesa de servir como plataforma de investigación, reflexión y debate para una sociedad más democrática, más humana.

25 años después, TELOS sigue más viva y más dinámica que nunca, en una posición que la sitúa entre las grandes publicaciones veteranas de la comunicación social en Europa y en España (coetánea de Media Culture & Society en Londres, de Réseaux en París…), como la primera revista en español en el campo de la investigación sobre las Tecnologías de Información y Comunicación y la sociedad. Gracias, primero, a Fundesco y su labor pionera en el campo de las tecnologías y sus implicaciones sociales, nunca suficientemente reconocida; gracias a Fundación Telefónica, que recuperó a comienzos del siglo XXI la marca y los objetivos; gracias, finalmente, a la nueva etapa abierta en 2004 que ha revitalizado, ampliado y relanzado su visión de este cada vez más anchuroso y trascendental mundo.

Obligadamente, TELOS celebrará así este aniversario en su próxima entrega, intentando sintetizar una trayectoria que constituye todo un testimonio, a través de sus páginas, de la historia comunicativa de España y también, y por extensión, del mundo desarrollado, de sus anhelos, sus utopías, sus realidades y contradicciones. Una historia de un cuarto de siglo protagonizada por investigadores, autores, profesionales y expertos que fueron reflejando los estudios, las preocupaciones y los debates sociales más significativos. Pero nuestras onomásticas no vienen cargadas de nostalgias, sino de ambiciones de proyección del pasado hacia el presente y de prospectiva del futuro. De ahí que hayamos concertado a autores de primera fila que nos han acompañado desde la primera etapa -con un bien ganado prestigio nacional e internacional que se mantiene- con nuevas firmas estelares que hoy figuran en nuestros consejos científico y de redacción.

Como muestra de esta permanencia y liderazgo en nuestro campo y perspectiva, TELOS puede ahora complacerse en anunciar que algunos de los más prestigiosos índices en Ciencias Sociales han reconocido ya nuestra trayectoria y rigor. Podemos así congratularnos de haber sido acreditados y aceptados, en los últimos meses, en marcas como E-Revistas, Latindex y RESH, revistas Españolas de Ciencias Sociales (CSIC/CINDOC), e incluso, a nivel internacional, en los prestigiados índices de Thompsom Reuters (JCR, Scisearch y SSCI) y ERIH (European Referente Index for Humanities), en los que figuran muy contadas publicaciones españolas de ciencias sociales y humanidades. Todo ello contribuirá a las garantías de calidad y rigor de nuestros textos, a la difusión mundial de sus contenidos y, en definitiva, al servicio a nuestros lectores.

A la espera de ofrecer pues ese número 81 antológico, que vendrá acompañado de seminarios y exposiciones, TELOS 80 presenta unos contenidos congruentes con sus líneas y objetivos. Especialmente queremos destacar el Dossier, ya cumplidamente presentado en su introducción por los coordinadores, Jorge Pérez y Ana Olmos (Universidad Politécnica de Madrid), sobre las tendencias de Internet y, especialmente sobre su gobernanza, una problemática de enorme trascendencia internacional. Los textos de base de los coordinadores y de expertos estrechamente vinculados a las instituciones internacionales implicadas, como los de Wolfgang Kleinwächter (Universidad de Aarhus, Suecia), de Markus Kunner (Foro para la Gobernanza de Internet) y de Eugenio Triana ( España, ICANN) plantean los elementos fundamentales de balance y futuro de la gestión de Internet. A la visión poliédrica de esta compleja serie de colectivos implicados contribuyen después los puntos de vista de Bruno Soria y Manuel Javier García Porras (Telefónica), así como los de Arturo Canalda (Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid) y Olga Cavalli (Universidad de Buenos Aires) que da cuenta además de la implicación estrecha de Latinoamérica en esta construcción de futuro.

Nuestra sección de autores invitados incorpora en esta ocasión dos textos brillantes. En el primero, Jean Claude Burgelmann, de origen belga, pero fichado por el think tank de la UE en La Cartuja (IPTS) desde hace años, explica su larga experiencia en la visión de lo que llama la Inteligencia Ambiental, un formidable reto tecnológico pero sobre todo humano, que enfrenta a la tecnología con los grandes desafíos europeos de nuestra época: el crecimiento económico, la sostenibilidad, el envejecimiento… Por su parte, Bernardo Díaz Nosty (catedrático de Periodismo en la Universidad de Málaga y acreditado investigador en el campo de los medios) entronca con la tradición malagueña de los parques científicos y tecnológicos desde la perspectiva del conocimiento, es decir, de la comunicación y la innovación al servicio de la sostenibilidad.

Las Tribunas de la Comunicación plantean dos visiones susceptibles de un rico debate: José Miguel Roca, de larga trayectoria intelectual desde su colaboración en Fundesco, se enfrenta al análisis de las demandas y defensas de los usuarios de las telecomunicaciones; e Ignacio Muro aborda las implicaciones de la teoría de la long tail (larga cola).

En Perspectivas, ofrecemos otras dos contribuciones diversas pero de gran impacto: Antonio Lastra (analista de la cultura) estudia los procesos de consumo y de identificación cultural, poniendo carne al famoso dicho de que una cultura sin imágenes (sin cine) pierde su propia imagen, pero apuntando más allá, a la esencia participativa y democrática de una sociedad; y Rafael Vidal (Universidad de Sevilla) analiza la problemática del multiculturalismo en la era de la globalización en una reflexión de amplias resonancias filosóficas que apunta a una nueva ciudadanía democrática.

En los Análisis, presentamos diversas aportaciones de gran interés. Comenzando por Laura López Romero (Universidad de Málaga) que estudia las publicaciones escritas que surgen en un medio representativo (la Málaga cosmopolita) en torno a las diásporas de extranjeros diversos -de los turistas a los inmigrantes- que pueblan esa tierra en las últimas décadas. Y siguiendo por Diego Fidalgo (profesional y estudioso de la radio) con su estudio sobre las radios universitarias españolas, en su contexto internacional, sometidas al mismo tiempo a un proceso ineluctable de digitalización y de cuestionamiento de su función social. Se añade en Experiencias, un análisis intensivo sobre la industria del cable en España y sus vicisitudes regulatorias a cargo de Joan Francesc (Universidad Autónoma de Cataluña).

En fin, TELOS consolida sus secciones de servicios funcionales a investigadores y profesionales de la comunicación y las comunicaciones, con apartados sobre la regulación de las comunicaciones (a cargo de Ángel García Castillejo), de Agenda de Congresos (Sagrario Beceiro), de revistas internacionales (Mariluz Barbeito y Juan José Perona), Investigaciones (Trinidad García Leiva) y libros editados (Acaçia Ríos) , cuya dedicación al proyecto de la revista y a su función social debe ser puesta de manifiesto en este preámbulo del 25 aniversario del proyecto TELOS.

Artículo extraído del nº 80 de la revista en papel Telos

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